Mi garganta quería gritar, pero mis labios solo sonreían.
Mis manos querían acariciar, pero mis dedos no respondían.
Mi corazón quería parar, pero mi aliento seguía caliente.
viernes, 1 de agosto de 2014
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario