viernes, 6 de diciembre de 2013

253

Hoy quemé tu carta. La única carta que me escribiste. Y yo te he estado escribiendo (sin que tú lo sepas) día tras día. A veces con amor, a veces con desolación, a veces con rencor. Tu carta la conozco de memoria: catorce líneas, ochenta y ocho palabras, diecinueve comas, unce puntos seguidos, diecisiete acentos y ni una sola verdad.

No hay comentarios:

Publicar un comentario